Como venía diciendo amables,
Hagan un cita con alguien para las 07:15,pruébenlo!.
Ya cuando preguntan el número del quai (binario o anden) como para confirmar lo que les esta informando la pizarra te cae la erchancha o la UCLAT (depende de que lado del país vasco te encuentres) a verificar tus documentos porque perder un tren es normal pero dudar de la pizarra te delata...
Rompiendo la niebla, a paso sostenido el tren fue remontando la delicada pendiente hasta llegar a Pau la capital de los pirineos atlánticos.Entre la espesa campiña de Aquitania mis ojos descubrían tesoros de verde frescura,el gave de Pau (el río de Pau) iba disimulando su silueta de cuando en cuando zigzagueando como las vías del tren mientras mi mente volaba a los pasos escarpados de mi Avila caraqueño cuando traíamos en hombros la imagen de Nuestra Señora de Lourdes desde la pastora hasta Maiquetía...como no recordar Campo Alegre,Sancho Orquis,La Llanada,La Cumbre hasta bajar a Quenepe?.
El tren seguía su camino salvando la cuesta mientras el verde iba afinando su intensidad con matices producto de la pugna de los tímidos rayos de sol con la niebla.Precisaba de mucha atención para no perderme ningún paisaje.
Hacer ruta en tren es la experiencia mas maravillosa que se puede sentir,háganlo cuando tengan oportunidad, les dará placer a sus sentidos.
A las 08:42 llegamos a Lourdes y de inmediato sacamos a relucir el arma de reglamento de las cartucheras:unas deliciosas baguettes con distintos rellenos para aplacar el hambre que como el frío pegaba por esas rues.
Recuperados de la fatiga andamos en busca del Santuario entre calles atestadas de tiendas donde venden todo tipo de recuerdos religiosos referidos a la Virgen hasta llegar a la explanada donde luce imponente la Basílica del Rosario,detrás, en sus cimientos esta la histórica gruta donde se le apareció a Bernardette Nuestra Señora bajo el nombre de:¨Yo Soy la inmaculada concepción¨.Me imagino que ante tamaña identidad Bernardita se quedó de una pieza...porque no es lo mismo que te digan yo soy la Virgen María,yo soy la Virgen de Lourdes o la Virgen de la gruta a que te digan: ¨Que Soy Era Inmaculada Concepcion¨ y en puro dialecto?,es para quedarse mudo.Ya con esto te estan dando a conocer tu esencia,tu sustancia...mas que nombre te estan transmitiendo como en un código de barras toda una información adjunta muy amplia,muy compleja pero que condensa lo que es esa persona o ente.
Bordeando la Basílica irrumpimos en la gruta;ríos de personas enfermas transportadas en sillas de ruedas o camillas (muchas en condiciones muy delicadas o en fase terminal) fluyen hacia ese manantial santo en busca del agua que pueda sanar sus dolencias o al menos calmar su desesperación,su angustia, con una firme ilusión.La imagen es inenarrable,solo ver la sonrisa de esperanza de un milagro en sus fatigados rostros al rozar con cualquier cosa la roca de la gruta calmaba en mi la angustia de la impotencia ante tanto dolor y desdicha.Es que era casi como narra el evangelio cuando Nuestro Señor pasaba por el camino haciendo milagros la gente se agolpaba y hacía tremendos esfuerzos tan solo por frotar su manto porque de Él emanaba una energía que curaba.
Otra cosa que calmaba mi angustia era la humilde dignidad con que llevaban sus dolores y eso es difícil,hay dolores que se pueden llevar mas fácil, ocultos,disimulados con una hipócrita sonrisa, pero la procesión va por dentro y te quema.Esas no, esas sonrisas eran tan potables,transparentes,puras y nítidas como el agua que brotaba incansable de la fuente de ese manantial.
Ahí descubrí el milagro que hay en Lourdes, en la gente, en cada uno de aquellos pálidos rostros de cada enfermo iluminados dulcemente con una sonrisa de felicidad espectante...
Conmovido todavía ante el momento vivido,regresamos al pueblo de Lourdes a internarnos en sus calles de nuevo para buscar un poco de oxígeno o alivio para el corazón...tropezamos con la casa donde creció Bernardette.En esa pequeña casa descubrí como la felicidad puede girar entorno a un molino.
Tomar la ruta a Lourdes fue un peregrinar en todo el sentido de la palabra;a las 06:18 en punto salió el tren.Este es uno de los tantos signos de que estamos en el primer mundo; todos los vehículos de transporte público sean carretas, trenes, tranvías, aviones, lanchas, taxis, bicicletas y todo lo demás que se mueva salen y llegan en tiempo.
Son tan precisos que hasta le ponen grados de dificultad a las horas como para tentar a los incautos que venimos del cuarto mundo.Un extracomunitario venido de Venezuela por ejemplo cuando ve en la pizarra 06:18 quai 3,involutariamente su mente lo coloca rapidamente en el nuevo circo o la bandera y entonces pierde el tren porque para el 06:18 no existe!!!, las 06:18 son las 06:30.Su huso horario solo ve en horas o medias horas,los minutos solo existen cuando se compromete al decir cosas como:"espérame un minuto","vengo en un minuto","llegue hace un minuto".Hagan un cita con alguien para las 07:15,pruébenlo!.
Ya cuando preguntan el número del quai (binario o anden) como para confirmar lo que les esta informando la pizarra te cae la erchancha o la UCLAT (depende de que lado del país vasco te encuentres) a verificar tus documentos porque perder un tren es normal pero dudar de la pizarra te delata...
Rompiendo la niebla, a paso sostenido el tren fue remontando la delicada pendiente hasta llegar a Pau la capital de los pirineos atlánticos.Entre la espesa campiña de Aquitania mis ojos descubrían tesoros de verde frescura,el gave de Pau (el río de Pau) iba disimulando su silueta de cuando en cuando zigzagueando como las vías del tren mientras mi mente volaba a los pasos escarpados de mi Avila caraqueño cuando traíamos en hombros la imagen de Nuestra Señora de Lourdes desde la pastora hasta Maiquetía...como no recordar Campo Alegre,Sancho Orquis,La Llanada,La Cumbre hasta bajar a Quenepe?.
El tren seguía su camino salvando la cuesta mientras el verde iba afinando su intensidad con matices producto de la pugna de los tímidos rayos de sol con la niebla.Precisaba de mucha atención para no perderme ningún paisaje.
Hacer ruta en tren es la experiencia mas maravillosa que se puede sentir,háganlo cuando tengan oportunidad, les dará placer a sus sentidos.
A las 08:42 llegamos a Lourdes y de inmediato sacamos a relucir el arma de reglamento de las cartucheras:unas deliciosas baguettes con distintos rellenos para aplacar el hambre que como el frío pegaba por esas rues.
Recuperados de la fatiga andamos en busca del Santuario entre calles atestadas de tiendas donde venden todo tipo de recuerdos religiosos referidos a la Virgen hasta llegar a la explanada donde luce imponente la Basílica del Rosario,detrás, en sus cimientos esta la histórica gruta donde se le apareció a Bernardette Nuestra Señora bajo el nombre de:¨Yo Soy la inmaculada concepción¨.Me imagino que ante tamaña identidad Bernardita se quedó de una pieza...porque no es lo mismo que te digan yo soy la Virgen María,yo soy la Virgen de Lourdes o la Virgen de la gruta a que te digan: ¨Que Soy Era Inmaculada Concepcion¨ y en puro dialecto?,es para quedarse mudo.Ya con esto te estan dando a conocer tu esencia,tu sustancia...mas que nombre te estan transmitiendo como en un código de barras toda una información adjunta muy amplia,muy compleja pero que condensa lo que es esa persona o ente.
Bordeando la Basílica irrumpimos en la gruta;ríos de personas enfermas transportadas en sillas de ruedas o camillas (muchas en condiciones muy delicadas o en fase terminal) fluyen hacia ese manantial santo en busca del agua que pueda sanar sus dolencias o al menos calmar su desesperación,su angustia, con una firme ilusión.La imagen es inenarrable,solo ver la sonrisa de esperanza de un milagro en sus fatigados rostros al rozar con cualquier cosa la roca de la gruta calmaba en mi la angustia de la impotencia ante tanto dolor y desdicha.Es que era casi como narra el evangelio cuando Nuestro Señor pasaba por el camino haciendo milagros la gente se agolpaba y hacía tremendos esfuerzos tan solo por frotar su manto porque de Él emanaba una energía que curaba.
Otra cosa que calmaba mi angustia era la humilde dignidad con que llevaban sus dolores y eso es difícil,hay dolores que se pueden llevar mas fácil, ocultos,disimulados con una hipócrita sonrisa, pero la procesión va por dentro y te quema.Esas no, esas sonrisas eran tan potables,transparentes,puras y nítidas como el agua que brotaba incansable de la fuente de ese manantial.
Ahí descubrí el milagro que hay en Lourdes, en la gente, en cada uno de aquellos pálidos rostros de cada enfermo iluminados dulcemente con una sonrisa de felicidad espectante...
Conmovido todavía ante el momento vivido,regresamos al pueblo de Lourdes a internarnos en sus calles de nuevo para buscar un poco de oxígeno o alivio para el corazón...tropezamos con la casa donde creció Bernardette.En esa pequeña casa descubrí como la felicidad puede girar entorno a un molino.
Así llamaba la santa a su casa,el molino de la felicidad.El molino estaba empotrado en la sala, a veces pienso que la casa fue construida encima del molino.En el transcurrieron los días mas felices de su vida;en torno a el se reunía la familia para trabajar todos los días entre risas y tertulias, síntiendo como el agua hacía girar la piedra que molía el trigo.
Al bajar el caudal de agua ya el molino no producía la harina de tiempos pasados ni tampoco la felicidad pero aquella energía hidráulica se transformó en energía espiritual de ahí en adelante para la niña vidente.
Al bajar el caudal de agua ya el molino no producía la harina de tiempos pasados ni tampoco la felicidad pero aquella energía hidráulica se transformó en energía espiritual de ahí en adelante para la niña vidente.
Al regresar de nuevo al tren que nos retorna a casa, seguía muy energizado de Lourdes...la lluvia que caía en todo el trayecto de retorno solo me hacía recordar aquella que ví brotar de la gruta, esta vez manaba del cielo para hacer girar los molinos felices que trituran nuestra vida.
FIN
EPÍLOGO
Hasta aqui mi giro a Lourdes, la primera entrega de estos cuentos.Deliberadamente he querido tomarme de la mano de la Virgen en el comienzo de esta aventura, con eso no pretendo convertir o convencer a nadie,Dios me libre!,los respeto mucho a todos.
Cuentos de Otoño son solo las trivialidades de mis viajes que de repetente te pueden servir para reir,aprender o soñar.
Si les gusta se lo dicen a otro y si no,me lo dicen a mi!.
Lo he disfrutado. Es un pedacito de historia narrada sin contorsiones ampulosa ni abuso del lenguaje. El hecho de estar en tiempo presente (presente histórico) lo hace más facil de leer y uno absorben con gusto y sin advertir; casi no puedes creer que termina cuando ha terminado.
ResponderEliminarLos párrafos son cortos y eso también colabora con que se digiera con deleite. El párrafo más pesado tiene menos de 15 líneas y se pasa bien.
MANUEL PINO OROPEZA