7 nov 2009

ENTRE VARGAS Y EL AVILA RENACERÉ

     Todavía tiemblo cuando atravieso tus pasillos,jardines y plazas porque no he dejado de amarte.Me venciste en una lucha desmedida pero acepté  el reto de aquellas condiciones y con gallalrdía  la derrota.
Tu, toda inmersa en esta colosal atmósfera densa de sabiduría,yo preso de mis temores,debilidades y angustias que sofocaron mi crecimiento hasta rendirme.
Como un espectro,a los que sueles vencer, un día abandoné tu campo y me perdí, advirtiéndote: ¨yo renaceré¨.
Ahora he vuelto mejor preparado para el combate, pero no soy yo,son mis álter egos,es mi linaje quien te va dar una buena batalla.Como te prometí, de mi tallo han reverdecido unos brotes mejor preparados a los que he transmitido los datos que eviten otra caída,esta es otra cepa menos aturdida y mas protegida por sus progenitores.
Hoy,al pie de la "casa que vence las sombras" he dejado enterrada de nuevo mi esperanza;con esta última plantita viene impreso en su código genético la creación,la imaginación,la proyección de sus ideas en objetos que en su conjunto darán armonía a los espacios con una impronta personal.
Las dos anteriores siguen echando sus raíces y creciendo día a día como señal de que fueron de buena semilla plantadas en tierra buena.
La primera busca hacer florecer la justicia entre sus ramas,la segunda trata de entender las lenguas para expresarse y comprender a esta Babel de papel que nos rodea.
En cambio, a esta le tocará diseñar de manera armónica una torre nueva donde el idioma pueda expresar la justicia respetando sus espacios.
El clima se hace cada vez más complicado pero ellas corren en su carrusel montadas en ponnies de ilusión.Como echando a volar unas cometas,  tratan de alcanzar sus objetivos constantemente asediadas por la corrosión.
Mas allá;en la plaza,Vargas,el ilustre,el sabio,mira con angustia cómo la barbarie se instala en su recinto sagrado tratando de agostar su fértil prado;como la cizaña esta plaga pretende asfixiar toda verde esperanza que pueda brotar,y en medio de esa angustia pareciera responder de nuevo ante la amenaza del bandido alzando su voz el civilista guaireño:"el mundo es del justo!!!! y no del fuerte¨, como pretende el Carujo actual.
Narvaez plasma en la piedra la serenidad estática del estudiante que hojea las páginas del libro de la vida,mientras tanto el reloj va marcando el tiempo del desfile de este mundo de azules bluejines que nos invita su voz escuchar.
FIN


EPÍLOGO
Los hijos son la extensión de nuestras vidas,junto a ellos vamos apostando a nuestro porvenir,cara o cruz.A ellos confiamos toda nuestra esperanza y las frustaciones las vamos confinando a sus pasos, pretendiendo reparar nuestros errores con una nueva variedad cultivada que pueda prolongar la existencia.

1 comentario:

  1. Hermoso, David. Todos tenemos la esperanza de que nuestros hijos ganen las batallas que dejamos atrás. A lo mejor las pelean, a lo mejor no les interesan, pero de que estaremos orgullosos de ellos, hagan lo que hagan,no hay duda.

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